Soñando de un sueño soñé portadat

SOÑANDO DE UN SUEÑO SOÑÉ

Una Flamenca Madre de un toro sin nacer.

En sus manos dos castañuelas de vestido de torear 

y en su sombra  una cruz de toros bravos.

A sus pies….una hombrera de torería, rota por la luz de luna….

Puente Jerez



 

He vivido al crearlas una profunda tormenta de sensibilidad hacia Lupe Sino y Manolete. Las he sufrido con naturalidad, emoción, amor y mucho respeto. Y he sentido también por supuesto, la gran responsabilidad que es contar esta historia en una época tan intensa como la actual para la tauromaquia en nuestro país. Pero ahora por fin las esculturas se defienden con vida propia y afortunadamente serán eternamente independientes.

Personalmente, agradezco al destino que me brindara el poder de esculpir en bronce esta historia de pasión y de llevarla a los escenarios en este teatro Tribueñe con textos e iluminación de Eduardo Pérez de Carrera y coordinación de Irina Kouberskaya. Creo que hablo en nombre de todos los creadores que intervienen en esta puesta en escena cuando digo que ha llegado el momento de contar la crueldad, el desdén y el desconocimiento con el que se trató a Antoñita Bronchalo Lopesino (su segundo apellido le sirvió para crear su nombre artístico: Lupe Sino). Con esta puesta en escena de escultura y teatro, esperamos contribuir a recuperar la figura de esta mártir de amor y de arte y como el arte de la tauromaquia, por más que se vean crucificadas, pisadas, abortadas y maltratadas, permanezcan siempre vivas. Se cumplieron en 2017 cien años del nacimiento de la máxima figura del toreo de todos los tiempos, Manuel Rodríguez Manolete: El mito. En homenaje del que fuera su único y gran amor, Lupe Sino, esculpí este espectáculo de escultura en escena que ahora comienza a tomar vida en el teatro Tribueñe de Madrid.

 

Soñando de un sueño soñé, que así se llama el montaje escénico que ahora les presentamos, viene a seguir esa línea surrealista mía de contar sentimientos y sensaciones a través de la escultura y toma su nombre de la colección de obras que en su momento modelé inspira-das en la trágica historia de sus vidas: de muchos es sabido que tras la cogida de Manolete, cayeron sobre su novia, Lupe, una maldición de habladurías y maledicencias que lograron borrarla de la historia literalmente antes incluso de enterrar al torero.

Ocurrió entonces, que sentí estas esculturas tan vivas, que casi gritaban ellas mismas querer contar su descarnada y anulada historia. Una historia, que es también la de la España de la época a la que los hechos nos remontan (1947).

Son intérpretes pues de este montaje teatral 20 momentos realizados en bronce, que con su propia interpretación y entrelazados entre si por la directora teatral Irina Kouberskaya logran contar esta historia de amor trágico y silenciado que no tuvo punto final. Nosotros hemos logrado simbolizarlo en escena con un monumento en bronce de tres metros representando el amor de Lupe Sino: desnuda, con la cabeza en cráneo de vaca brava y embarazada de un toro sin nacer. En sus manos sonando unas castañuelas de vestido de torear y a su espalda y en su sombra, una cruz de toros bravos. La escultura reposa sobre un pedestal de torería: una taleguilla rota de torear, ensangrentada de amor por las pisadas de la memoria y ese momento histórico de nuestra tierra.

ESCULTURA EN ESCENA

© David Fuentes.